Técnica: elegir una buena foto

Cuando tus modelos habituales son fotos, por ejemplo para un retrato, es fundamental aprender a elegir una buena. Los criterios básicos y fundamentales son dos. Primero que sea una foto de un tamaño suficiente para que se puedan apreciar bien todos los detalles. Esto normalmente no es difícil ya que por Internet circulan muchas buenas fotos, a buena resolución para que se puedan usar como modelo para un retrato. Segundo, y este es el aspecto más importante, es que la iluminación sea la correcta. Ojo que no he dicho buena, he dicho, la correcta. Fotos con iluminación suficiente, donde se aprecien todo los detalles hay muchas, pero a lo mejor no son buenas fotos para usar como modelo. No lo son por que la luz que se usó para hacerlas es demasiado indefinida. Por supuesto no hablamos ya de las fotos sobrexpuestas ni de las subexpuestas, esas ya ni las consideramos. Hablo de foto con buena iluminación pero incorrecta. Es necesario que haya sombras, no valen esas fotos de modelos de catálogos publicitarios, con iluminación general y demasiado photoshopeadas. Son mucho mejores las fotos donde la luz viene en un sentido concreto ─lateral, cenital, desde abajo─ y que hacen sombras, eso permite que los rasgos se definan mucho mejor, y le imprime carácter al modelo. Por otra parte el que haya sombras permite diferenciar mucho mejor los tonos claros, los medios y los oscuros. Es cierto también que las sombras no tienen que ser necesariamente muy fuertes, o que tengan que cubrir todo el rostro, pero tiene que haber sombras. Por supuesto esto vale para cualquier tipo de foto, incluso si solo se trata de una manzana, mucho mejor con sombras.

En el dibujo que acompaña esta entrada usé la misma foto, solo que arriba no puse las sombras, y abajo en cambio sí. El retrato de arriba podría ser un ejemplo de iluminación general imprecisa; se ven bien todo los rasgos pero no se distinguen ni tonos medios ni tonos oscuros. El efecto es de superficie plana. En el de abajo, con las sombras la sensación de realidad es mucho mayor, y ayudan a dar volumen y a definir las formas. Además el retrato tiene mucha más personalidad.

No os olvidéis de dibujar y de usar buenas fotos. Comentarios y opiniones siempre bienvenidos.

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