Una combinación complicada. Si te pasas con el rojo la cara puede llegar a parecer un filete crudo, al menos a mí me lo parece. La solución para mí está en trabajar por capas, añadiendo color suavemente una capa encima de otra, en el lugar adecuado, y por supuesto saber parar a tiempo ─cosa nada fácil por cierto─. Algún día haré una entrada sobre esto y mis tribulaciones con algunos dibujos, a los que les he hecho pasar verdaderas miserias.

Volviendo al tema, la ventaja del rojo es que ayuda a dar una sensación de realismo muy facilmente. Es decir que el dibujo acabado gana en realismo, con muy poco trabajo, y muy poco material. Eso nos permite trabajar sin tener que andar a preocuparnos por combinar colores y tonos. Esta ventaja no la tenemos trabajando en monocromo con algún color menos natural para la piel humana. Incluso para las personas con un color de piel oscuro iría bastante bien el rojo, aunque obviamente para ese tono de piel va mejor un color como el raw umber, y otros tonos dentro de los marrones.

Lo dicho, cuidado con la combinación rojo y negro, que si te pasas queda un poco gore, o al menos me da esa impresión a mí.

No os olvideis de dibujar y de ser felices dibujando.